Las Veinte Verdades del Justicialismo Peronista
El Peronismo fue un movimiento político de
Tercera Posición que surgió en la segunda mitad del siglo XX en Argentina,
impulsado por Juan Domingo Perón, general y político argentino que ocupo la presidencia
de su país por los periodos de 1946-1955 y 1973-1974. El Peronismo fue la doctrina
que dio origen y nutrió al Partido Justicialista, partido integrante de la
Organización Demócrata Cristiana de América, que en las últimas décadas a sido
desviado primero a la derecha liberal durante el gobierno de Carlos Menem
(quien se plegó al consenso de Washington) y finalmente a la izquierda
populista por los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernandez (los que abrazaron el Socialismo
Siglo XXI).
Fue un movimiento que se autodenominaba
nacional y popular, y sus principios eran el de “Justicia Social”, “Soberanía
Política” e “Independencia Económica”, englobaba a varias ideologías como el
nacionalismo argentino tradicionalista, como antesala al nacionalismo latinoamericano,
la democracia cristiana y el humanismo social-cristiano. El peronismo, como
movimiento de tercera posición, era anticomunista, contrario al capitalismo
estadounidense, a los movimientos de extrema izquierda y de derecha liberal.
En las relaciones internacionales Juan Domingo Perón, un admirador de Mussolini y de los movimientos nacionalistas de Tercera Posición de la Europa de entreguerras, quien no ocultaba su admiración por el régimen fascista, al que definió como "un ensayo de socialismo nacional, ni marxista ni dogmático", trató de mantener
siempre distante, sin perder las relaciones, tanto con los países del bloque
capitalista aliados de los EE.UU. como con los del bloque comunista satélites
de la URSS, y buscar acercamientos con el Movimiento de Países No Alineados, en
especial con el gobierno socialista árabe de Nasser en Egipto y el nacionalista
de Nehru en la India, el peronismo fue siempre un movimiento latinoamericanista
pues pugnaba por la unión de las naciones de América Latina, a diferencia del
latinoamericanismo de izquierda que surgió posteriormente con la revolución cubana,
éste era tradicionalista y social-cristiano, pensamiento que hizo patente en su
famosa frase “En el año 2000 nos encontrarán unidos o dominados”.
El gobierno de Perón fue totalmente antiimperialista pues era uno de los críticos más duros del intervencionismo estadounidense en América Latina y su colonialismo en Puerto Rico. Cultivo buenas relaciones con los gobiernos constitucionales de Carlos Ibáñez del Campo en Chile, Eurico Gaspar Dutra en Brasil, Enrique Hertzog de Bolivia, y los gobiernos dictatoriales de Alfredo Stroessner en Paraguay y Marcos Pérez Jiménez en Venezuela.
El gobierno de Perón fue totalmente antiimperialista pues era uno de los críticos más duros del intervencionismo estadounidense en América Latina y su colonialismo en Puerto Rico. Cultivo buenas relaciones con los gobiernos constitucionales de Carlos Ibáñez del Campo en Chile, Eurico Gaspar Dutra en Brasil, Enrique Hertzog de Bolivia, y los gobiernos dictatoriales de Alfredo Stroessner en Paraguay y Marcos Pérez Jiménez en Venezuela.
Cabe mencionar que el gobierno de Juan
Domingo Perón en Argentina, junto con el Estado Novo corporativista de
Getúlio Vargas en Brasil, han sido los dos únicos movimientos de Tercera Posición
que gobernaron a una nación latinoamericana durante el siglo XX.
"Estas son las
Veinte Verdades del Justicialismo Peronista. He querido reunirlas así para que
cada uno de ustedes las grabe en sus mentes y sus corazones; para que las
propaguen como un mensaje de amor y justicia por todas partes; para que vivan
felices según ellas y también para que mueran felices en su defensa si fuera
necesario..." Juan Domingo Perón, 17 de Octubre de 1950:
1. La verdadera
democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende
un solo interés: el del pueblo.
2. El Peronismo es
esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular, y por lo tanto, no
es peronista.
3. El peronista trabaja
para el Movimiento. El que en su nombre sirve a un círculo, o a un caudillo, lo
es sólo de nombre.
4. No existe para el
Peronismo más que una sola clase de hombres: los que trabajan.
5. En la Nueva Argentina
el trabajo es un derecho que crea la dignidad del hombre y es un deber, porque
es justo que cada uno produzca por lo menos lo que consume.
6. Para un Peronista de
bien, no puede haber nada mejor que otro Peronista.
7. Ningún Peronista debe
sentirse más de lo que es, ni menos de lo que debe ser. Cuando un Peronista
comienza a sentirse más de lo que es, empieza a convertirse en oligarca.
8. En la acción política
la escala de valores de todo peronista es la siguiente: primero la Patria,
después el Movimiento, y luego los Hombres.
9. La política no es
para nosotros un fin, sino sólo el medio para el bien de la Patria, que es la
felicidad de sus hijos y la grandeza nacional.
10. Los dos brazos del
Peronismo son la Justicia Social y la Ayuda Social. Con ellos damos al Pueblo
un abrazo de justicia y de amor.
11. El Peronismo anhela
la unidad nacional y no la lucha. Desea héroes pero no mártires.
12. En la Nueva Argentina
los únicos privilegiados son los niños.
13. Un gobierno sin
doctrina es un cuerpo sin alma. Por eso el Peronismo tiene su propia doctrina
política, económica y social: el Justicialismo.
14. El Justicialismo es
una nueva filosofía de vida simple, práctica, popular, profundamente Cristiana
y profundamente Humanista.
15. Como doctrina
política, el Justicialismo realiza el equilibrio del derecho del individuo con
la comunidad.
16. Como doctrina
económica, el Justicialismo realiza la economía social, poniendo el capital al
servicio de la economía y está al servicio del bienestar social.
17. Como doctrina social,
el Justicialismo realiza la Justicia Social, que da a cada persona su derecho
en función social.
18. Queremos una
Argentina socialmente justa, económicamente libre, y políticamente soberana.
19. Constituimos un
gobierno centralizado, un Estado organizado y un pueblo libre.
20. En esta tierra lo mejor que
tenemos es el Pueblo.